En la Republica Dominicana, a partir del año 1971 se ha designado el mes de Noviembre como el Mes de la Familia por el decreto 1656 del Poder Ejecutivo, esto se debe gracias a la solicitud del Movimiento Familiar Cristiano, con el fin de realizar campañas no sólo de recaudación de fondos, sino para la formación integral de las familias con el propósito de que éstas sean formadoras de personas, educadoras en la fe y promotoras del desarrollo integral de todos sus miembros.
Este mes de Noviembre es una buena epoca para meditar acerca de su familia y cómo fortalecerla. Las familias bien fortalecidas pueden vencer los obstaculos que se le presenten y estas luchan por perservarla para vivir dentro del Plan de Dios.
Fortalecer la confianza
Cumpliendo con las promesas hechas, las familias se consolidan y se convierten en relaciones confinables y los lazos entre ellos se fotalecen.
Mostrar compromiso
Las familias consolidadas se sienten como un equipo. Ellos comparten tradiciones tales como tener una cena de Navidad, una fiesta de fin de año, una misa de agradecimiento, celebraciones de cunpleaños y fechas importantes o con simplemente caminar juntos en un parque los fines de semana. Los miembros de la familia muestran su compromiso con la familia separando tiempo para los eventos familiares y haciendo sacrificios para cumplir con ellos.
Comunicación
Los miembros de familias fortalecidas hablan mutuamente acerca de decisiones importantes y planes diarios. Por eso es importante que en la familia se hable abiertamente de los sentimientos así como también de las actividades del día a día en la escuela, Universidad o en el trabajo. Cuando hay dificultades o problemas, hay que tomarse el tiempo para controlarse y calmarse antes de responder. No es bueno almacenar los enojos y molestias o dejarlas salir sin control. Comentar sobre las posibles soluciones a los problemas y trabajar juntos para encontrar la solución, es lo más factible.
Crecer a través de la crisis
Su familia no es la unica, todas las familias pasan por crisis. Por lo tanto, tenemos que usar las adversidades para aprender y crecer. Aun en las malas experiencias existen las buenas oportunidades y nos ayudan a compenetrarse más en familia. Admitir los problemas, en vez de ocultarlos es la mejor solucion y buscar ayuda cuando se necesite.
Pasar tiempo juntos
Las familias para que se mantengan unidas tienen que pasar tiempo juntos, caminando, hablando, leyendo, jugando, haciendo planes, cocinando. Algunos envuelven momentos especiales de intimidad, como leer un buen cuento antes de dormir y acomodar a los niños en su cama con un beso o simplemente dandole gracias a Dios todos los dias por los alimentos.
Diviértanse en familia
Las familias unidas saben que el divertirse es importante y hacen planes para divertirse juntos. Ellos planifican viajes, vacaciones o fiestas para la familia. Las familias fortalecidas saben que la risa es importante y usan el humor para ayudar a reducir el estrés. Los miembros de la familia se ríen juntos, no se burlan entre si.
Muestre afecto y amor
No importa lo que digan o hagan los hijos, ellos necesitan saber que sus padres los aman. Las familias fortalecidas saben mostrar cariño en muchas maneras. Los miembros de familia se dicen mutuamente, “Te amo”, “Estoy feliz de pertenecer a esta familia” o “Mi familia ésta unida gracias a Dios”. Ellos se dan abrazos, besos y muestran afecto con pequeños detalles. Ellos pueden llamarse mutuamente usando apodos y disfrutan recordándo las historias entre ellos y sus generaciones anteriores.
Por lo tanto, en este mes de noviembre vamos concentrarnos en la importancia que tiene la familia para cada uno de nosotros, sabiendo que la familia es la primera escuela de valores. Recordar que es en la familia donde nace, crece y madura el ser humano como persona y ente social. Cada ser humano lleva el sello de su familia y este lo marca para toda la vida.
Vamos a celebrar la bendicion de tener una familia y sobretodo de pertenecer a la gran familia de nuestro Señor Jesucristo.